Estoy inmersa en un pequeño cuento... o quizás se trata de una gran historia que se lleva parte de mi corazón... pues dedico en cuerpo y alma cada letra, cada tinta que suelta la pequeña pluma, cada sentir y cada suspiro que de madrugada sale a descaro sin querer; simplemente olvidando a través de los sentimientos tras estrofas.
Y es ridículo, pues de nada sirve ocultar el sentir... tus ojos son los mismos que confiesan que echas de menos, los mismos que lloran por lejanía, los mismos que sufren por ausencia... y quién sabe... los mismos que añoran el pasado... y es que ellos son los únicos que delatan tu agonía.
Me introduzco en un poema sin rima y me dejo llevar por su melodía; melodía que perdió debido al transcurrir del tiempo, pero que aún mi alma la percibe ahí... haciéndose notar, como cual latido de dolor en nuestro más profundo interior.
Sin más, estoy inmersa en un pequeño cuento... o quizás se trata de una gran historia... mi historia... nuestra historia.
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