sábado, 30 de enero de 2016

Imagina

Llueve y tras la ventana yo observo. Es algo insignificante pero me encanta comprobar el cielo tiznado de negro y ver las calles vacías. Solo se puede divisar a lo lejos un paraguas a toda prisa intentando refugiarse del agua. 

Es curioso escuchar ese sonido y sentirte a salvo escondida en algun lugar, allí donde piensas que jamás rozará una gota de ese torrencial que acontece la gran ciudad. Sonríes y al mismo tiempo pestañeas rápido cuando un rayo ilumina toda la calle; sientes miedo pero es una gran escena para plasmarla en uno de tus libros, ¿no crees?

Imaginátelo solo por unos segundos, tú, allí, en esa gran avenida, con un simple gorro que cubre tu cabello, un móvil empapado que ya no funciona y unas llaves que por arte de magia han desaparecido. Imagina un ruido extraño a tu alrededor, como un cliqueo que murmura en tu oído pero que no sabes exactamente de donde proviene. Contempla tu soledad no tan cierta y echa a correr lo más rápido que tus finas piernas te lo permiten y tropieza. Cubierta de barro permítenos observar una silueta que poco a poco a ti se acerca y con  un grito espeluznante déjanos imaginar el final de la historia.

Llueve y tras la ventana yo escribo. Es algo insignificante pero me encanta imaginarte empapada huyendo de un extraño susurro, de mis letras que van al compás de tus pisadas y ¿es verdad que solo llueve?

martes, 26 de enero de 2016

La lámpara y el pañuelo

Ha abierto los ojos demasiado temprano, parece que una pesadilla lo ha despertado de su más profundo soñar. Entre sus manos tiene un pañuelo de tela con corazones y un nombre bordado; a su izquierda la lámpara de su habitación sigue encendida, es extraño que no se acordase de apagarla nada más cerrar los ojos para dormir.
Está sentado en la cama y observa un punto fijo mientras recuerda unas imágenes que le acontecieron esa misma tarde antes de llegar a casa...

"Su cuerpo se quedó petrificado observando la entrañable imagen que tenía ante sus ojos. No eran más que dos adolescentes enamorados que reían a carcajadas por nada en concreto, que se cogían de las manos y entre líneas leían su futuro. Escuchó, sin querer, que hablaban del amor, se veía a leguas la bonita inexperiencia y sus ganas de volar. Se miraban de una forma peculiar y en sus ojos brillaba el sentir más puro".

Piensa en esas dos personitas mientras agarra con fuerza su pañuelo. Se lo acerca con delicadeza a su rostro, inspira su olor y en ese instante solo la recuerda a ella, mientras hilaba sentada a su lado en la cama con esa lamparita encendida.
Ahora él llora, por un momento esa tarde le pareció la de 1981, cuando sujetaba su cintura y solo podía contemplar sus ojos brillantes. Ella siempre tenía la mirada perdida, estaba completamente hechizada, hada del amor.
Suspira, se acuerda a la perfección que esa noche apagó la lámpara antes de dormir y por arte de magia se ha despertado con ella encendida. Solo él sabe que su amada, una noche más ha estado a su vera, siempre a su lado desde 1981.
 








 

jueves, 14 de enero de 2016

Inspiración


Ella...

Solía prender una pluma y dibujar el paisaje que se le postraba a sus pies.
Imaginaba el mejor lienzo, las más bellas pinturas y una fuente de inspiración. 
Componía en su cabeza la melodía que en algún momento le ofreció su más alabada obra de arte y saboreando la satisfacción volvía a sonreír. 
Soñaba con el museo más grande, los artistas más reconocidos y el calor de un hogar; soñaba con retratos que la mirasen como ningún hombre lo había hecho jamás.

Nosotras...

Solíamos visitar bonitos rincones en busca de una musa, en ocasiones ella cerraba los ojos, respiraba profundamente y se limitaba a soñar. Sin más, sin mirar sus dedos, éstos solos empezaban a crear. ¡Era maravilloso! y lo recuerdo cómo si fuera ayer.
Ella, mi artista y dueña de mi corazón se enamoró...

Ahora...

Sostiene su pluma y dibuja esos ojos verdes que la encandilaron. El mejor lienzo es su espalda y él su más preciada fuente de inspiración. Ella saborea la ilusión que tanto tiempo atrás había imaginado. Sueña con esos bonitos rincones y los visita con su verdadera musa.

Yo...

Escribo al aire estos versos. Ahora la inspiración se ha marchado, porque mi única musa, mi amor... se enamoró. El amor, sin duda, toda una fuente de inspiración.




Seres mitológicos

Estoy sentada en el suelo, con las piernas cruzadas. En el sofá está mi hermano, dormido. Todo está en silencio; él ha llegado de trabajar ...