Me niego a odiar las caídas, pues éstas no se harán presentes si me niego a querer... me niego a querer de madrugada si al amanecer desapareces...
Me niego a olvidar de nuevo, a encontrar un hueco en tu vida si un inmenso vacío se esconde en las cabidas del dolor... me niego a observar que no permanece un "te extraño" en la noche.
Y es que el negar está tan presente en mi persona... que solo quiero decir ¡no! de nuevo.