El verdadero insomnio da la vuelta a los sentidos, transformándolos en ilusión y sosiego... por el vientre curvilíneo que da paso a una nueva vida en un futuro, pero que ahora plano se halla, esperando con paciencia... después de su lisa piel, la tranquilidad llega a sus senos, los mismos que amamantarán a la criatura que crece dentro de su ser.
El cansancio pasa también por sus muñecas y sus finos y largos dedos, solo quiere dormir y soñar que por fin lo tiene en sus brazos...
Bonita ilusión esa de sentir el amor verdadero, amor que en nueve meses verá la luz y será la auténtica media naranja de su cuento de hadas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario