Caminábamos de la mano, pero siempre, en todo momento, tú estabas pendiente de que alguien conocido apareciese, para separar nuestras manos cuando esto ocurriese.
Seguíamos caminando a oscuras, pero no porque de noche fuese, sino porque yo a mi alrededor no miraba, sólo era tú luz lo que me inspiraba y por tanto me iluminaba.
El resto era sombra que me abrazaba, y aunque en ocasiones alguna racha de frío entrase por nuestros poros, a mí, el calor de sentirte a mi lado tapaba los escalofríos típicos de la madrugada.
Ya ni si quiera el hambre me importaba, pensaba en tus ojos y en tu mirada, soñaba con tus besos, esos que tanto necesitaba, imprescindibles se volvieron, los esperaba siempre con ganas.
Como pareja caminábamos, como pareja nos mirábamos... y como pareja yo te amaba.
¿Cómo fingir que no te extrañaba?
¿Cómo fingir no saber que tu no me amabas?
¿Cómo fingir que igual me daba que tu no me desearas?
¿Cómo fingir no saber que tarde o temprano lejos de mí te encontrabas?
Simplemente... ¿Cómo fingir?
lunes, 6 de agosto de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Seres mitológicos
Estoy sentada en el suelo, con las piernas cruzadas. En el sofá está mi hermano, dormido. Todo está en silencio; él ha llegado de trabajar ...
-
http://issuu.com/virginiaespinosa0/docs/mu__eca_de_papel._cap__tulo_cinco.d
-
Corazón... ¿sigues ahí? Ya casi nunca oigo tus latidos, creo que se han quedado parados por miedo, se hallan callados por temor a hablar m...
-
- ¿Qué ha sido ese ruido? - No estaba solo, su gran gato persa se había adentrado en su habitación y vigilaba con impaciencia la venta...
No hay comentarios:
Publicar un comentario